El gran beneficio de la filosofía para niñas y niños es el desarrollo global de la persona, estimulando sus capacidades estéticas, críticas y creativas. La filosofía ayuda a los niños a tener habilidades que les permitirán enfrentarse a la realidad que les toque vivir.
Filosofía y educación en valores
El beneficio es que aprenden a pensar y aprender a pensar supone muchas cosas, Lourdes Cardenas comenta que el que sabe pensar es aquel que tiene una mente libre, crítica, coherente… El que sabe pensar es el que sabe tomar decisiones, es el que es capaz de argumentar, decidir, construir hipótesis, relacionar, imaginar, soluciones, pensar de manera alternativa. El que es capaz de pensar puede reflexionar acerca de sus valores, cuestionarlos y reformularlos, puede analizar la sociedad y soñar con cambiarla, puede comprender, escuchar y sentir a los demás. En definitiva, pensar, nos define como humanos, pero saber pensar supone construirse como humano, con responsabilidad y autonomía, para mejorar y cuidar no solo al resto de la humanidad, sino también al resto de la sociedad.
La Filosofía para niños tiene origen en EEUU a finales de los años 60 Lipman fue quien planteado la necesidad de acercar la filosofía a niños niñas y jóvenes como herramienta para el desarrollo del pensamiento crítico. “Ellos no sólo son curiosos y lúdicos, sino que también son racionales y capaces de involucrarse en diálogos filosóficos” Lipman concibe la práctica como el desarrollo de algunas habilidades de razonamiento, a partir de esas cuestiones del ser humano como verdad, belleza o amistad… La filosofía en niños y niñas permite que se fortalezcan sus habilidades cognitivas, de investigación, razonamiento, organización de información, dialogo y el cuestionamiento de la realidad en la que viven cotidianamente.
La filosofía en niños y niñas permite que se fortalezcan sus habilidades cognitivas, de investigación, razonamiento...
Garet B. Matthews (2014) afirma que los niños y niñas abordan de manera completamente natural los principales problemas filosóficos y que lo hacen con claridad y orden. Así a través de una serie de ejemplos, tan enigmáticos como tiernos, prueba que la abstracción forma parte de la mente infantil. Además invita a quienes aprecian a los niños y niñas a estimular su fantasía y pensamiento filosófico.
Autonomía
La filosofía en ellos y ellas es abrir la posibilidad de que puedan establecer nuevos caminos para desarrollar su pensamiento hacia la crítica y la creatividad y ofrecer espacios de filosofía para vivir en una sociedad democrática más justa.
Los niños y niñas desde muy pequeños están intrigados consigo mismos, con el mundo, y con los demás, se asombran con todo aquello que no entienden o les sorprende, esta curiosidad y este asombro configuran una predisposición para filosofar. Las niñas y niños ya piensan por si solos, así que no les hace falta mucha preparación, lo que si hace falta es nuestra preparación como adultos para guiar en esos procesos de reflexión.
La filosofía y pensamiento crítico
El pensamiento creativo para resolver problemas nuevos y el pensamiento “cuidadoso” para tener en cuenta a los demás. Entonces podríamos decir que aprender a filosofar les invita a pensar y sentir, para disfrutar de una auténtica libertad de pensamiento y acción.
Es necesario enseñar a las niñas y los niños a filosofar, de ese modo aprenderán a pensar y podrán construir un mundo mejor, participar activamente de en un proyecto común, podrán ser ciudadanos activos y comprometidos, capaces de separar la verdad de la mentira en estos tiempos en los que resulta difícil… Para contribuir al bien común tenemos que poder pensar de manera lúcida y creativa.
Educa a los niños y no será necesario castigar a los hombres.
Dijo Pitágoras hace unos 2.500 años, sin embargo, la disciplina que precisamente enseña a pensar, cuestionar, a sacar conclusiones, a aplicar respuestas críticas a los problemas cotidianos, es decir, a vivir de forma reflexiva… suele estar arrinconada o infravalorada. Ese saber que juega un papel fundamental a la hora de formar a ciudadanos y ciudadanas comprometidos y con juicio propio queda en un segundo plano en nuestra sociedad.
Utilidad
Por lo tanto, podemos decir que filosofar con los niños y niñas pretende:
Cultivar las habilidades de diálogo, cuestionamiento e investigación reflexiva.
Promover el sentido de comunidad o grupo de investigación a través del diálogo cooperativo.
Vivenciar un aprendizaje crítico, creativo y afectivo.
En resumen, entre muchas otras, podemos resumir las utilidades de la filosofía para niños y niñas en las siguientes:
Construir ciudadanía.
Estimular la participación.
Intentar el consenso.
Cultivar la razonabilidad.
Practicar la negociación.
Darse tiempo para la deliberación.
Celebrar la diversidad.
Aprovechar el conflicto como posibilidad de aprendizaje.
Promover la empatía.
Reconocer las creencias (La creencia es una posición mental que acepta como verdad algo que no se puede razonar)
Construir el respeto.
Impulsar la creatividad.
Filosofía y Actividades de Tiempo Libre Educativo
Programar en nuestras intervenciones de ocio y tiempo libre espacios donde poder dialogar y fomentar estas habilidades que comentamos, ahora bien, ¿Cómo?... Existen diferentes y muy variadas formas de hacerlo, como monitora o monitor, educador o educadora, coordinadora o coordinador de proyectos de ocio educativo encontraras según tu forma de planificar, diferentes actividades, aquí te vamos a dejar algunos ejemplos de como podríamos fomentar y dar valor a este tipo de intervención.
Las dinámicas de reflexión en grupo, donde deben llegar a un consenso, ya sea para salvar a personajes de la dinámica o elegir los mejores materiales para salvarse ellos y ellas mismos. También las dinámicas en las que trabajamos nuestra escala de valores son muy interesantes.
Pero no solo en la dinámicas podemos encontrar estos espacios para la reflexión, en los juegos cooperativos, en los competitivos, en manualidades donde tengamos que compartir materiales con los demás... en todos estos espacios se esta generando la posibilidad de desarrollar sus habilidades sociales, de reflexión, cognitivas... Hablar, una vez finalizado el juego o actividad sobre ¿Cómo se han sentido? ¿Cómo se han relacionado con los demás? Si han ganado o perdido ¿Cómo lo han vivido?
Las actividades que conlleven un aprendizaje vivencial también son muy interesantes, por ejemplo, estamos en un aula de naturaleza y queremos mostrarles las distintas especies de flora que hay en la zona, en lugar de utilizar un cártel donde vienen todas ellas, hacemos un excursión en la que cada participante o grupo, lleve un cuaderno donde estén todas las especies y tenga que marcar aquellas que ha encontrado a su paso por el entorno.
En definitiva, aprovechar cada momento que compartimos con ellas y ellos para generar aprendizajes significativos.
Me parece un gran artículo ya que desde bien pequeños hay que enseñarles valores con actividades divertidas
Hola Esther. Mi experiencia como madre de un niño de 11 años y un chico de 20 años son gratificantes. Siempre con la filosofía y educación en valores he obtenido buenos resultados. Ya sé que son diferentes edades y lo llevo bastante bien.
Cuando un niño piensa siente y habla hay que comunicarse con él para que se sienta valorado y comprendido.
Es importante dar a conocer la filosofía desde pequeños. Por una parte, para evitar ese rechazo que se produce por la asignatura en la ESO y, por otra parte, para, como se dice en el texto, aprender a pensar. Los niños son como esponjas, pero estos, en vez de absorber agua absorben todo tipo de conocimiento. Por tanto, ¿qué mejor etapa para enseñarles a pensar que esta?
Es un articulo interesante ya que nos hace ver que hay que enseñar a filosofar a los niños y niñas desde pequeños para que tengan una buena base de conocimientos. Para aprender a dialogar, razonar, aprender de sus errores... Hay que enseñarles a empatizar y ser respetuosos con el resto de la gente.
Esther comparto tu reflexión desarrollado en tu artículo, al considerar que cada día podemos aprovechar cada espacio como un recurso de enseñanza y aprendizaje, las niñas y los niños nos han aportado maravillosas maneras de ver su entorno con el entorno adulto, es muy interesante cuando mencionas que “ Ellos no sólo son curiosos y lúdicos, sino que también son racionales y capaces de involucrarse en diálogos filosóficos” considero que es muy certera tu frase, ya que al platicar o dialogar con una niña o un niño y entrar en la realidad que el o ella contempla, como adulto re-aprendo y a su vez des-aprendo de mi propia realidad, es decir que por momentos sus palabras demuestran tanta simpleza qu…